Podría decir, como Lina Morgan, que estoy agradecida y emocionada. Desde que el mes pasado salió a la calle mi segunda novela, no he dejado de acumular experiencias bonitas y, algunas, francamente emotivas.
Para empezar, en la primera semana se vendieron los ciento cincuenta ejemplares que me hizo llegar la editorial. Tuve un grupo bueno de «agentes comerciales» que se dedicaron a hablar de mi novela por tierra, mar y aire. Estoy tremendamente agradecida por su confianza y por su capacidad de generar interés por el libro de una desconocida. Cada una de las personas que ha comprado MZUNGU. Mujer blanca extranjera ha hecho realidad mi sueño de ser útil, no solo a la reflexión y al debate sobre la violencia machista, la desigualdad, la pobreza, la falta de oportunidades… Cada una de esas personas ha apoyado, además, mi compromiso de colaboración con la asociación Goizargi Emakumeak y con la misión de las hermanas Marianitas en Kaikor; los dos proyectos a los que está siendo destinada la recaudación de la venta de mis libros.
Tras vaciar las cajas apiladas por tan breve espacio de tiempo en mi casa, me animé con la prensa. Envié una nota a los medios de comunicación locales pidiéndoles un espacio para presentarles mi libro; para dar a conocer mi historia y todas las cosas que me han pasado en torno a la creación de la novela. Y la respuesta, ha sido maravillosa también.
He hecho unas cuantas entrevistas ya y sigo pendiente de concretar algunas más. Cada minuto de radio, cada línea de una pieza escrita los siento como auténticos regalos. No solo por la oportunidad, por decidir recibirme a mí y no a otra persona en mi lugar con otra historia, otra propuesta, otro pedacito de vida que compartir; también por el calor que he recibido, la complicidad, el cariño, la amabilidad, los guiños de los y las colegas de profesión con quienes me he ido encontrando desde mis años de facultad. Está siendo fácil ir con mi libro en el corazón, en la cabeza y, en ocasiones, bajo el brazo, y charlar sobre MZUNGU. Mujer blanca extranjera y todo lo que rodea a este libro.
Algunas de las librerías que me apoyaron con la venta de mi anterior novela –Brujas bailando el tango– me dicen que su clientela está pidiendo mi libro y que necesitan ejemplares en stock para satisfacer la demanda sin la demora que impone la impresión bajo pedido. Ante esta situación, siento por un lado mucha alegría por lo que supone para mí que todas esas personas hayan decidido pasar unas horas entre mis páginas. Por otro lado, me entristece la espera y me inquieta que acaben por sentir que no les compensa esperar tantos días cuando, en estos momentos prenavideños, están las librerías a reventar de novedades literarias.
Estoy esperando (más de lo previsto) los libros que encargué para llevar a las librerías de Vitoria (los cierres perimetrales no me permiten ir más allá). Y a mí también se me está haciendo muy largo 🙁 Pero ya no puede faltar mucho. Facilito aquí (iré actualizando) todas las formas de hacerse con mi libro (unas más rápidas y otras más lentas) y me atrevo a pedir a quien me lea y quiera darle una oportunidad a MZUNGU, un poco de paciencia; porque si los escritores y escritoras sin padrinos queremos salir algún día del anonimato, necesitamos este tipo de apoyo también 😉
Dejo también al final de este post, los enlaces con las entrevistas que he ido haciendo en estas últimas semanas, por si a alguien le apetecen unos minutos de radio o de lectura digital para saber más de mi novela.
Cierro con un GRACIAS mayúsculo a todas las personas que están apoyando, de mil maneras distintas, este sueño cumplido de publicar MZUNGU. Mujer blanca extranjera.
Entrevistas realizadas

Hoy por hoy Vitoria, Cadena Ser 30/11/2020
Provocar una reacción. Diario de Noticias de Álava 26/11/2020
Magazine, Cope Euskadi 24/11/2020
Informativo Araba, Radio 5 – RNE 24/11/2020
Araba Gaur Magazine, Radio Vitoria 16/11/2020
Página web de la editorial CALIGRAMA noviembre 2020